:::::::::::
--¿En qué piensas? --preguntó Ángel, mientras observaba fijamente el rostro de Leonardo, quien a su vez veía su cuerpo de una forma muy intensa--.
--En la magia que encierra tu cuerpo --contestó Leonardo.
Pero éste no se atrevía a ver directamente a Ángel, temía que de hacerlo resultara irreversiblemente enamorado de él.
Era tan hermoso. Y tenerlo a su lado, con el brillo de la luna sobre su piel, era simplemente maravilloso.
Leonardo acariciaba la cintura de Ángel.
<<En tu cuerpo, envuelto en sombras de deseo, locura y poesía.
:::::::::::
La belleza de la vida la encuentras en la misma vida
No hay comentarios:
Publicar un comentario