Has pensado....

: : : ―Deberías ver los ojos de Axel ―contesté dándole la espalda mientras caminaba hacia la ventana que (no fue ninguna sorpresa) estaba cubierta por tablas.
«Incluso tú llorarías al ver esos ojos.» : : :

sábado, 26 de febrero de 2011

la pesadilla de su recuerdo

Tenia la esperanza de que anoche pudiera tener un momento de tranquilidad, algunos largos minutos que me permitieran despejar mi cabeza y tranquilizar mi mente.
Pero me resulto imposible.

Quise llegar a mi hogart, tomar algo del refrigerador y tumbarme en la cama envuelto con la reconfortante oscuridad. Queria cerrar mis ojos y recordar las cosas maravillosas y divertidas que hice con mis amigos.
Aquel tour por el centro comercial, donde termine comprando algunas prendas de ropa interior lo bastante insinuantes para volver locas a algunas chicas, aunque no fuera mi principal objetivo.
Mi intencion era el... Volverlo loco a EL.

Tenia el deseo de alegrarme con la oscuridad de mi habitacion y excitarme con el viento fresco que entraba por la ventana, pero no pude concentrarme.
El cansancio me termino venciendo y los problemas me agobiaron hasta dejarme dormido, justo en medio de suenos terribles y desesperantes.
Anhelaba poder descansar, tal vez jugar un poco con mi cuerpo y mi imaginacion, pero despues de aquella noche...
Despues de aquella noche nada volvio a ser igual. Sentia que algo en mi interior no encontraba descanzo. No podia decir si era mi corazon, mi alma, mi mente o todo mi cuerpo.
Desde que me encontre con aquel... Hombre, ser, todo cambio. Llego a mi vida a cambiar la vision de todo. Mis propias caricias sobre mis pliegues de la piel no volvian a saber igual.
No sentia las caricias de otras personas sobre mi, totalmente diferentes.
Incluso la emocion de explotar en un grito ahogado con mi cuerpo tenso sobre mi cama, no tenia el mismo efecto sobre mi.

Su tacto hizo que todo perdiera sentido. Sus besos me dejaron completamente sediento de sus labios.
Auqella noche, me hizo perder el deseo de estar con alguien mas.

Quise que anoche fuera un momento tranquilo, de lujuria y desahogo... Pero no pude. Gracias a ese hombre, a ese ser maravilloso que me sedujo con su frio tacto y sus ojos profundos.
Con todos sus movimientos... Y sus deliciosos colmillos que me propiciaron las mas grandes maravillas y visiones del mundo.
Quise tocarme plenamente... Pero cerre los ojos y las visiones de su cuerpo me turbaron de sobremanera... Hasta que el sueno termino venciendome.

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