Soltar la mente y pensar en qué habrá atrás de aquellas antenas, o cómo se verá la ciudad desde los cerros que rodean la ciudad; es una actividad que me resulta bastante desestresante.
De pronto divagar, pensar en todo y en nada es liberador, divertido e incluso muchas veces ayuda para el proceso creativo que --en lo particular-- me interesa bastante.
Preguntémonos si alguien vive debajo del mar, y cómo sería; si alguien vuela en el espacio infinito que existe más allá del cielo azul de nuestro mundo. Si hay astronautas extraviados en otras latitudes y simplemente desearon permanecer en aquellos mundos, diferentes y maravillosos.
Preguntémonos...
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A.A.R
La belleza de la vida la encuentras en la misma vida
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