Road trip.
Los
viajes terrestres son pesados, agotadores y en ocasiones hasta incómodos.
También
son bastante relajantes y sirven para liberar tensiones y despejar nuestras
mentes, tan acostumbradas a llevar un ritmo acelerado de vida y de pensamiento.
Llega
el punto en que el ojo necesita el deleite de lo diferente. Observar paisajes
distintos al rutinario que presenciamos —aunque no observemos— todos los días.
De
pronto resulta bastante placentero comenzar una excursión dentro de nuestra
propia localidad, salir a caminar, descubrir lugares, callejones, plazas y
parques nuevos de los que jamás nos habíamos percatado.
Posteriormente
me dedicaré a explorar mi propia ciudad, la selva de concreto y edificios antiguos
y modernos que me rodean, sin embargo, en esta ocasión, hablaré de la visita a
ciudades distintas a donde resido actualmente.
La
capital del mundo de la plata.
En
la época colonial la región de Parral tuvo un gran desarrollo como centro
minero, agrícola y ganadero. La historia de su fundación menciona que el
alférez real Don Juan Rangel de Viezma encontró plata en el cerro de la prieta.
Las
leyendas locales cuentan que las vetas de plata de la mina que ahí se construyó
eran tan abundantes que parecía como si brotasen espontáneamente del subsuelo.
Durante
el auge minero de la región en la época colonial, la ciudad de Parral recibió
el nombramiento de "Capital del mundo de la plata" por el monarca
europeo Felipe IV ; por esta razón, los lugareños y
conocedores de la región suelen llamarla: Parral, capital del mundo.
Es
una de las ciudades medias del estado y constituye un importante centro
regional para el comercio entre las regiones sur de Chihuahua y norte de
Durango.
Su
intrincada red de callejuelas y callejones son rasgos distintivos de la ciudad
y son éstos los que le hacen conservar su aire colonial.
Viajé
a la ciudad el fin de semana pasado, en compañía de mi novio y amigos. Mejor
compañía para hacer cualquier viaje o actividad, no existe. Amor y amigos, vaya
combinación.
Resultó
ser una travesía bastante satisfactoria y, tengo que decirlo, cumplió
cabalmente con su objetivo: despejarme de los problemas y múltiples ocupaciones
que estas semanas me han abrumado al cansancio.
Decidí
simplemente tomar el auto, manejar en carretera y dejar mi lista de pendientes
(corta o larga) detrás de mí. Todo fue realmente genial.
Próximo
road trip: El Paso, TX. Estados
Unidos.