“Durante mi período de
vacaciones, dije desde el primer día, me voy a dedicar a descansar, pasar
tiempo con Héctor, trabajar en la novela, terminar la tarea de dos materias de la
maestría (una de ellas incluye el borrador del primer capítulo de mi tesis), practicar
con la fotografía, visitar amigos y estar con la familia”.
Ahora me doy cuenta, dos
semanas después, que fue un plan sumamente ambicioso. Hoy se terminan mis
vacaciones, mañana regreso al trabajo —y de guardia— y creo que solamente me
dediqué a pasar tiempo con el flaco (que siempre es agradable) y estar con
amigos y la familia.
Mi trabajo de maestría
está detenido, y atrasado, y el avance de la novela no es tan considerable como
hubiera querido. Así pues, lamento informar que no pude cumplir con mis
intenciones de vacaciones.
El descanso tampoco llegó
como yo deseaba, pues a partir del cuarto día de vacaciones comenzaron las
posadas, las fiestas y los desvelos propios de las épocas decembrinas.
Dos posadas del trabajo,
de amigos y vecinos de Héctor y míos, fiesta de cumpleaños de una de esas
grandes amigas, viaje de compras de dos días…
Una celebración por
adelantado de mi cumpleaños (por aquello del fin del mundo) otra posada más, con
una amiga del trabajo y sus amigos, y una cena anoche.
Así pudiera resumir mis
vacaciones, mucho desvelo, mucho cansancio, compras e intercambio de regalos;
pero, sobre todo, sonrisas y excelente compañía. El pasar los días con Héctor,
viajar juntos y festejar con su mano en la mía, es siempre algo que pone una
sonrisa en mi rostro.
Regreso al trabajo, no
tan descansado como quisiera y no con el trabajo hecho para como lo tenía
pensado, pero contento y satisfecho de estas dos semanas.
Mañana es Nochebuena y
pasado Navidad… felices fiestas a todos, gracias por avanzar conmigo un año
más; a los pocos o muchos que leen este blog, gracias por brindarme unos
cuantos minutos de sus días y noches, gracias por ver la pantalla y agitar las
palabras que dejo desde una mesa en el rincón de un café o desde el escritorio
de mi cuarto o desde mi cama.
Sinceramente les deseo
solamente lo mejor, aunque sabemos que la vida no siempre es felicidad y risas.
Aprendamos de nuestros errores y meditemos sobre nuestros aciertos,
esforcémonos por ser mejores personas, pues podemos lograrlo.
Felices fiestas y un
excelente año 2013.
Saludos a todos,
AR
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