Has pensado....

: : : ―Deberías ver los ojos de Axel ―contesté dándole la espalda mientras caminaba hacia la ventana que (no fue ninguna sorpresa) estaba cubierta por tablas.
«Incluso tú llorarías al ver esos ojos.» : : :

viernes, 27 de agosto de 2010


Quémame en tu fuego,
quiero morir en tu veneno,
veneno de tu piel.


Sí, tápame los ojos
y dame de beber
antes que salga el Sol;
sí, tómate la vida
pero hazlo de una vez.

Ven, te daré todos mis sueños
que vivo de ilusiones
y así no sé vivir.

martes, 24 de agosto de 2010

Número 100

Me parece un tanto extraño que, después de ocho meses, me encuentre en este momento llegando a la publicación 101 de este blog.

Cuando me decidí en abrir este espacio, pensé que lo dejaría meses y meses en completo abandono, sin abrir la página ni actualziar las imágenes o demás "accesorios" que puedo utilizar. Pensé que sería un espacio muerto, un lote baldío en esta cyber-ciudad tan inmensa que es el Internet. No me imaginé que en este espacio encontraría, entre muchas otras cosas, un lugar donde puedo ser yo mismo, donde puedo hablar sin miedo a la sensura (que realmente no tiene por qué ser así), encontré un lugar donde quedan mis sentimientos y pensamientos sobre cuestiones de nuestro diario acontecer, e incluso ilusiones guardadas muy dentro de mi mente y mi alma.
Encontré, en lugar de un espacio muerto, una forma de hablar, de gritar y de ser escuchado al otro lado de la montaña.
Gracias a quienes me han seguido (algunos más constantes que otros) continué escribiendo y publicando, gracias a aquellos que han sido mis ávidos lectores o mis aburridos deambulantes con felices encuentros accidentales con este espacio; gracias a esos momentos en que me dormí quince o veinte minutos después de mi hora, por tener una publicación más, es que hoy llegamos al 101.

Sin embargo, el título de esta entrada marca un número diferente y no es por equivocación sino por mero capricho y una coincidencia sumamente placentera.
Inicié mi blog con una historia que no se pretendía fuera más allá de tres capítulos. Comencé con una historia que tenía como estructura el inicio, el desarrollo y su final a lo largo de veinte o veinticinco cuartillas, nada más.
Comencé este espacio publicando "The Wolve´s Howl", que a lo largo de ocho pesados meses, y 175 cuartillas después, se convirtió en "A Wolve´s Story". Me parece sumamente adecuado festejar mi centenar de publicaciones, precisamente con la entrada anterior, cuando por fin dejé de escribir y coloqué el punto final (al menos de esa historia); siendo que con esa historia en particular comencé las publicaciones.

Inicié y concluí con la historia de Jordan y Axel. Inicié y concluyo ahora con la historia de dos lobos atraídos por la naturaleza, y dos hombres enamorados por su propia esencia.

Curiosamente, dentro del año del Centenario, también yo tengo algo de tres cifras para poder festejar.

viernes, 20 de agosto de 2010

A Wolve´s Story



La visión del bosque le fascinaba,

la emoción de poder convertirse lo extasiaba,

pero fueron sus caricias, las del hombre,

las que hicieron que lo amara como un animal.

El lobo aullaba a la luna,

al menos eso pensaban, pero en realidad

aullaba por su amor,

para que llegara a su lado.

El arduo trabajo esta concluido.

El punto final se puso después del diálogo y la historia se ha contado.

Ha sido contada de una manera veraz, por fin, un trabajo para poder presumir.

La Historia de los Lobos, por fin llegó al FIN.

miércoles, 18 de agosto de 2010

Yay!

Yay! On my way to the office, on my car... Listenin' to Michael Buble 'Cal me Irresponsible' and, as always, thinkin' of U!

Io ti amo, mio ammore.

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Enviado desde mi oficina móvil BlackBerry® de Telcel

domingo, 15 de agosto de 2010

Vampire Thrall

―Extract.

"Back in Paul´s cell, I lay on the bed and watched him take off his red pullover, then his jeans, then his briefs. His cock curved up beautifully, like a bird arching its neck. He stripped off my briefs an placed them carefully on the night table. Then he climbed onto me, his knees bracing my hips, his thighs forming an arch, and his cock hovering over my belly. My prick stiffened toward his cool buttocks.

He lubricated me with a few squirts of the lotion he kept on his nightstand. When he reached back to guide me in, lamplight glinted over his rosy brown nipples.

His torso lifted an fell as he relaxed his thighs, his long fingers spreading like petals. He raised his face ―stretching his graceful throat― then lowered his forehead, staring into my eyes. His cheeks reddened. His mouth opened and he gulped air.

Determined to give him what he needed, I drilled de boy. I clasped his hands, raised up my head, and strained toward his throat. But my fangs started to descend, so I quickly lay back, turning my face away from the lamp until they receded.

Paul rocked up and down, his belly quivering, his palms pressing my chest as I worked him with my hand. I pumped harder, impaling him deeper until he moaned an shuddered, showering me with his warm seed. Then waves of orgasm exploded in my belly.

I pushed him off and stretched myself over him. His damp chest heaved. I kissed his temples, his eyelids, his lips.

‘I love you’, I whispered.

With his eyes closed, he smiled as though his dreams had all come true."

martes, 10 de agosto de 2010

Novios


¿Qué significa para alguien ser novio de alguien? ¿Qué razón tiene una persona para aventurarse a comenzar una relación con otra persona?

¿Qué deseo lo motiva a quedarse al lado de alguien? Y sobre todo: ¿Qué beneficio obtiene cuando se hace novio de ese alguien?

Para mí ―no hay otra manera de comentar las cosas más que experimentarlas en carne propia― todo representa un universo de emociones, sentimientos, ilusiones, fantasías, aventuras y demás palabras que podemos leerlas y leerlas hasta encontrarles algún significado cósmico. Sin embargo, me parece que es apropiado resumirlo a una sola palabra. Una palabra que abarca tanto como las aguas del océano, una palabra que no termina en sus diez letras, una palabra que supera decepciones, pero no permite abusos; que aguanta peleas pero no apapacha agresiones; para mí, ser novio de alguien significa: compromiso.

Es mi novio. Una frase que representa más de lo que se puede ver o escuchar, en un primer encuentro. Un noviazgo se representa con hechos y se demuestra con acciones que son apreciables por todos los que rodean a la pareja (nada tengo, aclaro, contra aquellos que prefieran viajar de brazos en brazos ―por no mencionar otras partes de la anatomía masculina―, de boca en boca o que incluso con una relación estable inviten a alguien más a las fiestas privadas de la pareja).

Caminando, quisiera sostener tu mano; juntos apoyarnos y ayudarnos a dar el siguiente paso, después de todo de eso se trata la vida (y el noviazgo). Debemos procurar el apoyo, la comprensión y recordar que no todo es miel sobre hojuelas, pero disfrutar de esos momentos en que parecemos flotar sobre nubes y comer arcoíris de malvavisco como un determinado cereal un tanto homosexual.

Tener una relación de noviazgo representa mucho más que presentarlo como mi novio, exige respeto, exige su lugar ante los demás, exige su independencia y su tiempo de soledad. Incluso entre pareja, necesitamos un poco de espacio para poder respirar tranquilamente, tu de un lado de la cama, yo del otro… una relación basada en la tranquilidad, seguridad y confianza que se demuestren mutuamente. Sin importar el pasado (vaya que sabré de eso…), sin importar lo que se hizo, lo que no se hizo, o con quien lo hizo. El pasado quedó, se concretó… falta mañana, pasado mañana y el día siguiente.

Caminen tomados de la mano, sin miedo, con presencia en cada paso, con sentimiento en cada mirada, con un latido del corazón en cada sonrisa. Caminemos de la mano a través de la transitada avenida de la vida, al lado de quien en verdad amamos, aunque en ese momento no sea con quien queramos pasar todos nuestros días y cada una de nuestras noches; no importa que mañana ese alguien se vaya (siempre dejará una huella en nuestros cuerpos, mentes o corazones), no importa si es el elegido o no… aunque puede serlo, por otro lado. Puede llegar a ser esa persona especial que siempre hemos estado buscando. Que nos acompañe en viajes de trabajo, que comparta la cama con uno y no solamente para tener noches interminables de ardiente amor, sino para simplemente quedarse dormido enseguida de nuestra persona.

Puede ser esa persona a la que siempre le deseamos buenas noches, a la que quisiéramos besar de buenas noches.

Debemos entonces abrir los ojos, ver a quien está a nuestro lado y sujetar su mano como si no hubiera un mañana, pero pensando en el mañana cuando imaginemos los futuros viajes y las aventuras que llegarán. Abracémoslo para que no se pueda escapar, y dejémoslo respirar para que no se quiera escapar.

Sírvanme estas líneas para felicitar, de nueva cuenta, a aquellos que luchan y creen en la igualdad, a aquellos que caminan del lado de la equidad y la Justicia. Expreso mis felicitaciones (como anteriormente lo había hecho en este espacio) a aquellos quienes se entregan verdaderamente por los ideales y principios del Derecho. A quienes no solamente creen, sino que están convencidos ―y así lo demuestran con acciones como la del día de hoy― que verdaderamente todos merecemos el respeto, la dignidad, el cuidado y la protección de la Ley.

Mis felicitaciones a los señores Ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, quienes el día de hoy demostraron presentar una visión más amplia del panorama que se avizora en nuestro país; del inminente futuro que terminará llegando hasta nuestras puertas.

A ti, quien eres fuente de inspiración y constante lucha en mi quehacer diario.

A ti, quien siempre caminas a mi lado, tomados de la mano soportando miradas y críticas, aunque sea de forma espiritual.

A ti, que como yo, sueñas con un día poder despertar en un lugar donde podamos sonreír al pensar que es nuestro hogar.

A ti, que como yo, me amas con todo tu corazón.